La optimización de motores de búsqueda pasó por grandes cambios a lo largo de los últimos años, gracias a la aplicación de nuevos algoritmos y al proceso de adaptación constante para mejorar la experiencia de los usuarios. Hoy por hoy, la Inteligencia Artificial es más relevante que nunca, a tal punto que Google lanzó Bard en Europa y Brasil.
El revuelo que transitamos por el auge de modelos de IA convive con cierta incertidumbre por el mismo desconocimiento de sus alcances. Aun así, es posible dilucidar dos carriles de uso en la actualidad.
- Uno para buscar y encontrar información
- Para generar contenidos, dado que los sitios web generan o se apoyan en recursos de Inteligencia Artificial para su elaboración.
Aunque estos carriles pueden confundirse, son distintos entre sí.
Índice de temas
Motores de búsqueda
Comenzando con el primero, Google utiliza la IA -o algoritmos de aprendizaje automático (Machine Learning)- desde hace muchos años para organizar los resultados de búsqueda que, a diferencia del software tradicional, le da la capacidad de aprender por sí misma.
Básicamente, se le proporciona a esta tecnología un conjunto de sitios web y se le indica que los posicione de la manera que más satisfaga al usuario en base a su búsqueda, sin necesidad de conocer los detalles internos de cómo realiza esta correlación, lo que en cierto sentido lo convierte en una “caja negra“.
Generación de contenidos
En el segundo carril circula la generación de contenidos utilizando herramientas como, por ejemplo, ChatGPT. Estos modelos existen desde hace algunos años, pero su popularidad ha aumentado recientemente gracias a su accesibilidad y bajo costo.
Hoy en día, cualquier persona puede producir material en forma de imágenes, videos, audio y texto. ChatGPT es una forma de Inteligencia Artificial conversacional que es muy buena simulando una conversación humana y predecir la siguiente palabra de manera efectiva. Muchas personas la utilizan para la creación de contenido, ya que es experta en generar predicciones coherentes para completar frases o textos.
Aunque estos modelos pueden parecer una solución para la creación de contenido, existen diferencias significativas entre uno desarrollado por una persona y uno generado por una IA conversacional. Su principal limitación radica en que su entrenamiento es para conversar y no para investigar, razonar, analizar, pensar o generar contenido original.
Las limitaciones de ChatGPT
ChatGPT y otras inteligencias artificiales conversacionales son muy buenas para obtener ideas o resumir textos extensos, y no tanto para generar contenido desde cero. Por estas razones, no recomendaría su uso para crear algo nuevo y por otro lado, tampoco se posiciona bien en Google cuando se trata de contenido generado completamente mediante una IA conversacional.
Comprender sus limitaciones y utilizarla de manera complementaria a las habilidades y capacidades humanas, en lugar de sustituirlas por completo y explorar continuamente esta tecnología, nos permitirá aprovechar el potencial de la IA conversacional de manera más efectiva y responsable en el futuro. Los usos y aplicaciones de esta herramienta están aún por descubrirse.
Estamos viendo solo la punta del iceberg.
Artículo publicado originalmente en 04 Ago 2023
