Denominada por algunos expertos como la tecnología de la confianza, una de las grandes virtudes que destaca a una red de Blockchain es su capacidad de rastrear y comercializar cualquier cosa de valor, reduciendo así los riesgos y costos para todas las partes involucradas.
Puede definirse como un gran libro “compartido e inmutable” que, en una red de negocios, facilita el proceso de registro de transacciones y de seguimiento de activos. A su vez, éstos últimos pueden ser tangibles (una casa, auto, dinero en efectivo o terrenos) o intangibles (patentes, marcas, derechos de autos, propiedad intelectual).
Por eso, Blockchain está ganando cada vez más protagonismo y su adopción se está extendiendo a diferentes sectores. A continuación, dejamos algunas características de esta tecnología y ejemplos concretos de cómo su implementación puede ayudar a una compañía a cumplir sus objetivos:
Índice de temas
Transparencia del Blockchain:
Todos los usuarios de la red pueden ver toda la información en el sistema de registros. Está disponible sin inconvenientes. De hecho, cualquier miembro puede consultar las transacciones realizadas, verificarlas o comprobar su procedencia. Por eso se dice que su sistema es superador. Asimismo, si se desea proteger cierta información confidencial, Blockchain podría ofrecer procesos de autenticación y acceso de nivel.
Trazabilidad:
Las compañías pueden rastrear la información de una forma más simple, ya que cada bloque de la cadena almacena información y se encuentran vinculados entre sí. También, a través del Blockchain se puede procesar el historial de manera permanente. Todo esto, en su conjunto, ayuda a las empresas a hacer un seguimiento exacto y completo de cualquier transacción que realicen, accediendo a información en tiempo real.
Confianza y Seguridad
A través de su transparencia y trazabilidad, se genera una mayor confianza y seguridad. El intercambio de datos se da mediante operaciones cifradas y codificadas. Esto garantiza la seguridad de todos los involucrados en la transacción, protegiendo los intercambios de información al cien por ciento. Por otro lado, el hecho de que la información esté descentralizada hace que se garantice su inmutabilidad. El control está en manos de los usuarios.
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