La administración pública, sobre todo en Latinoamérica, se caracteriza por sus largos procesos burocráticos y por ser reticente a la adopción de las nuevas tecnologías. Podríamos profundizar hasta el cansancio acerca de por qué ocurre esto, pero la conclusión nos llevaría al mismo lugar: se necesita una actualización “urgente” orientada al uso de tecnologías de la información para simplificar trámites y automatizar procesos.
Desde ese lugar es que toma relevancia el E- Gobierno que, según la CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe), consiste en la transformación de todo un gobierno, generando un cambio de paradigma profundo. “Es un concepto de gestión que fusiona la utilización intensiva de las TIC, con modalidades de gestión, planificación y administración, como una nueva forma de gobierno”, describe.
En una misma línea, especialistas mexicanos en servicios de Tecnología de la Información y Telecomunicaciones, sostienen que la puesta en marcha de esta solución no solo implica el uso de las TICs, sino también la reingeniería de los procesos administrativos públicos, la simplificación de las estructuras administrativas y la adopción de estrategias de ejercicio y control del gasto y sus ejecutores”.
Beneficios del E- Gobierno
Una de las grandes ventajas que podría aportar la adopción del e-Gobierno, según la mirada de estos expertos, es incrementar la “capacidad institucional de provisión y entrega de bienes y servicios”, a fin de cumplir con lo prometido a los ciudadanos.
En ese sentido, señalan que los programas sociales – para dar un ejemplo- se pueden estructurar de manera más ágil; ya que se tiene un mayor control sobre los recursos y más información sobre la ciudadanía.
“En cuanto a la adquisición de bienes y servicios por parte del gobierno, los procesos de litigios se desarrollan con mayor rapidez y estructuración, haciendo que las empresas privadas cumplan con lo requerido”, describen luego.
En ese sentido, resumen que sus ventajas podrían encasillarse en estos tres aspectos:
- Mejora el intercambio de información en la provisión de bienes y servicios a los ciudadanos y a las empresas
- Optimiza la operación del gobierno en términos de su eficacia y eficiencia incluyendo la operación intergubernamental
- Mejorar la participación social.