Con el fin de brindar mejores experiencias y servicios, las inmobiliarias aprovechan las posibilidades que ofrece la transformación digital. El auge de las redes sociales, la inteligencia artificial (IA) y el análisis de datos, por ejemplo, son solo algunas de las cuestiones que ya se tienen en cuenta en el sector, haciendo que cada una de las fases del proceso sea más simple y transparente.
En este sentido, Martín Cox, Director de Miranda Bosch Real Estate & Art, explicó: “Contamos con un sitio que lanzamos hace unos meses con las últimas tecnologías. Ha sido desarrollado internamente y es un privilegio tener una página web como esta, ya que facilita la experiencia de búsqueda, con filtros específicos para nuestro negocio, es rápido y se pensó primero para dispositivos móviles, que hoy representan el 75% de nuestro tráfico”.
Impacto en todas las etapas
Los avances tecnológicos facilitan la actividad de estas empresas desde el primer momento, y evidencia de ello es su influencia en la etapa inicial de búsqueda de un inmueble. Actualmente, los portales inmobiliarios que concentran información, los sitios web, las redes sociales y los contenidos multimedia de calidad, pueden marcar la diferencia. “En Miranda Bosch, por ejemplo, contamos con un sistema que utiliza inteligencia artificial para recomendar propiedades a nuestros clientes”, comentó el ejecutivo.
Esta no es la única novedad en la industria. También la Realidad Virtual (RV) se presenta como una oportunidad para experimentar y mostrar las propiedades. Esta herramienta contribuye a que los clientes participen activamente en los proyectos, por ejemplo, al personalizar el diseño interior de una propiedad o la distribución de sus muebles, lo que puede aumentar su interés en la compra.
Por otra parte, los sistemas de análisis de datos permiten evaluar tendencias y estadísticas relevantes a los agentes. “Tenemos un CRM in-house que nos ayuda a centralizar la información y compartirla en toda la inmobiliaria, para que todos podamos acceder a información actualizada y centralizada, incluso para poder acceder a la información de colegas, con lo cual hoy todos operamos en red, y eso hace que la gestión sea más sencilla”, compartió el directivo de Miranda Bosch.
En cuanto a las transacciones finales, Martín Cox afirmó: “la tecnología atravesó todo el proceso de compra y búsqueda de un inmueble y esto hace que surjan más y mejores transacciones, más seguras, transparentes, rápidas, y con mayor información”. Por ejemplo, la adopción de firmas digitales es beneficiosa en el caso de las operaciones a distancia.
Las limitaciones en el sector inmobiliario
En primer lugar, las regulaciones a nivel país representan una traba para la incorporación de las tecnologías emergentes conocidas como PropTech. Si bien estas llegan con el propósito de simplificar, un proceso burocrático con implicaciones legales, impositivas y contables ralentiza los negocios.
Por otro lado, el hecho de que el sector inmobiliario sea un mercado bastante tradicional fomenta la resistencia a los cambios, y por ende, a la adopción inmediata de las tecnologías. Sin embargo, “En Miranda Bosch abrazamos e invertimos fuertemente en tecnología, porque estamos convencidos de que será el negocio a futuro”, sentenció el Director de Miranda Bosch Real Estate & Art.
“La tecnología va a hacer que las inmobiliarias sean más eficientes, más profesionales y trabajen mejor, dando un mejor servicio a sus clientes, logrando más y mejores transacciones, además de ayudar a que estas transacciones sean más seguras, transparentes y rápidas”, finalizó.