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Office Team Building: cómo construir un equipo exitoso

Una estrategia que ayuda a las organizaciones a construir una cultura empresarial ganadora basada en los recursos humanos. El Office Team Building mejora las habilidades y multiplica los resultados positivos, como la productividad y la resiliencia empresarial, y la inclusión y el bienestar de las personas.

Publicado el 23 Sep 2024

Office Team Building

El Office Team Building es una actividad empresarial de la que se habla desde hace décadas. El objetivo principal es crear grupos unidos, donde las personas se conozcan, confíen entre sí y trabajen mejor juntas, lo que, a su vez, potencia la productividad y creatividad dentro de las empresas.

Hoy en día, esta práctica debe integrarse en la estrategia empresarial porque ayuda a las organizaciones a enfrentar algunos de los grandes desafíos actuales. El trabajo híbrido, que divide a los equipos en subgrupos presenciales y remotos; la escasez de talento, que obliga a las empresas a cultivar de manera más eficaz la satisfacción y compromiso de su personal; y los imperativos éticos de inclusión y diversidad, que requieren valorar y asegurar la participación activa de todos los miembros del equipo.

En definitiva, el Office Team Building es una actividad estratégica dentro de una empresa resiliente. La capacidad de una organización para resistir y reaccionar ante mercados y contextos cada vez más cambiantes depende, principalmente, de sus personas y de sus propios liderazgos. Este proceso es una parte esencial para construir grupos de trabajo sólidos.

¿Qué es el Office Team Building?

El Office Team Building, según nos ayuda a entender la Universidad de Berkeley, es un proceso continuo que convierte a un grupo de trabajo en una unidad cohesionada. Los miembros del equipo no solo comparten expectativas al completar las tareas del grupo, sino que también confían y se apoyan mutuamente, respetando las diferencias individuales de cada uno.

Este proceso implica el diseño de actividades que promuevan la colaboración entre los miembros del equipo y potencien su rendimiento. El objetivo es trabajar mejor juntos y formar relaciones duraderas mediante el desarrollo de capacidades como la comunicación, la gestión del tiempo, la resolución de problemas, la capacidad de escuchar, el pensamiento crítico, la colaboración y el liderazgo.

La tendencia hacia el trabajo en equipo comenzó oficialmente en 1941 con la fundación de la escuela de formación experiencial Aberdovey, a cargo del pedagogo alemán Kurt Hahn, en Gales, con la ayuda del armador inglés Lawrence Holt. Entre los principales teóricos del tema se destacan el psicólogo Carl Rogers, Edgar Morin, Bruce Tuckman y Stephen Covey, autor del libro Los siete hábitos de las personas altamente efectivas.

¿Por qué es importante el Office Team Building y cuáles son sus ventajas?

El Office Team Building ofrece múltiples beneficios. Estos son algunos:

  • Confianza: Al completar tareas juntos, los miembros del equipo se conocen mejor y generan confianza mutua.
  • Comunicación abierta: Los ejercicios de formación de equipos crean un entorno donde se comparten ideas, comentarios y críticas constructivas.
  • Reducción de conflictos: Disminuye la frecuencia de los conflictos y mejora la capacidad para aprender de los enfrentamientos.
  • Aumento de la productividad: Mejora la conexión entre los equipos, incluso en entornos remotos.
  • Fomento de la creatividad: Las personas que trabajan bien juntas son mejores a la hora de innovar y resolver problemas.
  • Inclusión y bienestar: Aumenta la participación de cada individuo, promoviendo el bienestar, la motivación y la implicación en las metas del equipo.
  • Atracción de talento: Los candidatos buscan más que un buen salario; valoran el bienestar que la organización ofrece a sus empleados.
  • Cultura corporativa: Promueve una cultura organizacional sólida y facilita el cumplimiento de objetivos estratégicos.

Tipos de Office Team Building

Los ejercicios de Office Team Building suelen dividirse en dos grandes categorías: ejercicios basados en actividades y ejercicios basados en habilidades y aptitudes.

La formación de equipos basada en actividades puede ser tanto física como intelectual. Ambos tipos permiten al equipo conocerse mejor y fortalecer lazos de confianza mientras trabajan juntos para alcanzar un objetivo común. Las actividades físicas, como juegos, deportes o búsquedas del tesoro, están diseñadas para sacar al equipo de su zona de confort y explorar diversos entornos y desafíos. Es importante tener en cuenta la inclusividad en este tipo de ejercicios.

Office Team Building

Por otro lado, las actividades intelectuales se centran en hacer que los equipos piensen estratégicamente y resuelvan problemas. Algunos ejemplos incluyen torneos de juegos de mesa, rompecabezas y acertijos, que permiten a los equipos identificar las fortalezas y debilidades de sus miembros y gestionarlas.

La formación de equipos basada en habilidades, en cambio, ayuda a desarrollar una competencia específica dentro del equipo. El objetivo es enseñar una habilidad que puedan aplicar tanto en el trabajo como en su vida diaria. Ejemplos de esto incluyen ventas, liderazgo, negociación y gestión de conflictos. Además, la formación basada en la personalidad ayuda al equipo a utilizar estilos de comportamiento más efectivos en distintas situaciones. Los juegos de rol y las simulaciones son ejercicios típicos en esta categoría.

¿Cómo garantizar el éxito empresarial?

Para asegurar el éxito del Office Team Building, los líderes deben centrarse en algunos objetivos fundamentales: mejorar la comunicación, generar confianza, facilitar la resolución de problemas y la toma de decisiones, y mejorar las habilidades de planificación y adaptabilidad.

Las actividades deben ser divertidas y estimulantes, adaptadas a las características del equipo y sus integrantes, y no deberían percibirse como una imposición desde la dirección. Incluso cuando se trate de actividades organizadas, es ideal dejar un pequeño espacio no planificado que los miembros del equipo puedan llenar según su criterio.

¿Cómo ser un líder en trabajo en equipo?

El rol del formador de equipos es guiar al grupo hacia la cohesión y la productividad. Los expertos en la materia afirman que el equipo tiene vida propia y debe tratarse como si fuera una sola persona. Su bienestar, compromiso y eficiencia deben cultivarse a lo largo del tiempo.

Algunos consejos para planificar las actividades son:

  • Centrarse en áreas clave de desarrollo: Evaluar lo que el equipo necesita y diseñar actividades que respondan a esas necesidades.
  • Involucrar a los empleados: Recoger ideas y comentarios de los empleados y promover la inclusión.
  • Establecer objetivos claros: Definir los objetivos de la actividad antes de comenzar para generar una mentalidad positiva en el equipo.
  • Asegurar la colaboración: Fortalecer la colaboración y gestionar la competencia interna dentro del equipo.
  • Incluir actividades de voluntariado: Son una excelente manera de resolver problemas de la vida real.
Office Team Building

¿Cómo motivar a los equipos?

La Harvard Business Review ofrece una pequeña guía para los líderes de equipo que adquiere un valor excepcional en la era de la Gran Renuncia:

  • Crear certeza y estabilidad: El líder debe garantizar a los miembros del equipo que estará presente para ellos en el futuro, brindando apoyo incluso en momentos difíciles.
  • Aplicar retroalimentación continua: Este enfoque permite evaluar la carga de trabajo de forma colectiva e individual, evitando que algunos se sientan subestimados o sobrecargados.
  • Permitir la autonomía: Una vez que los objetivos están alineados, se debe dar suficiente libertad a las personas para decidir cómo, cuándo y dónde completar su trabajo.
  • Crear una conexión emocional: Enfrentar juntos los grandes desafíos y fomentar la amistad entre los miembros del equipo, desde encuentros personales hasta celebraciones grupales.

Los siete pilares del éxito

Para concluir, es importante recordar los siete pilares del éxito propuestos en el libro de Covey Los 7 hábitos de las personas altamente efectivas. Estos hábitos incluyen ser proactivo, empezar con un fin en mente y poner las cosas en el orden correcto. Luego, se centran en la interdependencia: buscar soluciones que beneficien a todos, comprender a los demás antes de intentar ser comprendido, y crear sinergias combinando las fortalezas individuales. Finalmente, el séptimo pilar es el que engloba a todos los anteriores: mejorar continuamente, o como lo define Covey, “afilar la sierra”, sin detener nunca el crecimiento.

Fuente: Peoplechange360.it, Network Digital360

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Redacción InnovaciónDigital360

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