Analistas de la industria observan que hay un problema vinculado a la fuerza laboral global, que tiene que ver con el alto grado de centralización que existe en algunos países. Ellos entienden que el mercado necesita que haya competencia para que sea “saludable” y, al mismo tiempo, que los trabajadores tengan diferentes opciones para elegir.
Sin embargo, señalan que cuando se permite que las megacorporaciones crezcan, adquiriendo subsidiarias sin límite, esa posibilidad se elimina.
Algo así está ocurriendo en los Estados Unidos, con Amazon, donde uno de cada 153 empleados de este país trabaja para la compañía de Jeff Bezos (datos de Forbes US). Un número realmente impactante.
¿Qué ocurre cuando hay una profunda centralización del empleo?
Como decíamos al comienzo, se elimina la posibilidad de elegir, ya que gran parte de todas las oportunidades del campo se van a reducir solo a un puñado de empresas. Y no sólo eso, sino que también las grandes corporaciones podrían aprovechar esa situación para no brindar las condiciones de trabajo que corresponden, al no tener la motivación ni necesidad de hacerlo.
Economía colaborativa:
En este contexto, se instaló el concepto de economía colaborativa, considerada como una forma para que los empleadores puedan trabajar por su cuenta. Sin embargo, esto también creó escenario donde el freelance termina trabajando más del tiempo de lo que lo haría bajo una relación tradicional de dependencia, aunque sin ningún beneficio.
En diálogo con Forbes, especialistas marcan que esto no quiere decir que la GIG Economy – término que se usa para denominar un mercado laboral en el que contratistas y trabajadores independientes reciben pagos por trabajos o tareas a corto plazo-, esté excluida de ser una solución.
De hecho, deslizan que con la rápida transformación “de las normas del lugar de trabajo en los últimos dos años, así como con el hecho de que cada vez más empleados reestructuran sus prioridades hacia horarios flexibles y oportunidades de trabajo desde casa, el trabajo tipo gig economy parece ser una revolución inevitable”.
En ese sentido, añaden que la industria del comercio electrónico, con una infraestructura fiable y justa del trabajo gig, más sindicatos robustos, podría ayudar a poner de nuevo parte del poder en manos de la gente. Imaginan un mercado laboral donde los trabajadores puedan comprometerse con la industria, trabajo por trabajo, o durante un período de tiempo. Pasando por diferentes instalaciones según circunstancias, necesidades, términos y beneficios.