Los principales directores de información (puesto conocido como CIO en inglés) de EE.UU. concuerdan en que 2022 es un año de desarrollo vital para mejorar la experiencia de los usuarios, la productividad de los trabajadores y la protección ante piratas informáticos.
Por empezar, como la pandemia no ha terminado aún, se seguirá optimizando el trabajo remoto e híbrido. Por ejemplo, un gigante del sector pretende seguir desarrollando la tecnología sin contacto en sus tiendas físicas para vender con mayor seguridad a través de aplicaciones para celulares, geovallas y aparatos móviles. Además, estas técnicas digitales permiten recolectar información para mejorar el servicio al cliente y los productos y servicios en sí que se le ofrecen. Esto puede a su vez conllevar una inmersión en el metaverso y en las realidades virtual y aumentada con el objetivo de crear aplicaciones de uso real que simulen experiencias físicas. Incluso se habla también de unir tecnología e información para satisfacer al público, creando artefactos que le proporcionen más datos, pero con menor complejidad.
Otro gran desafío de los CIO es hallar maneras más eficaces de usar estas informaciones provenientes de dispositivos e interacciones digitales de los clientes. El enfoque está puesto en el dominio de estos datos, la privacidad y las plataformas empresariales para así generar ofertas más adecuadas a cada integrante del público.
Más inteligencia artificial
En 2022 se verá también un mayor empleo de modelos algorítmicos en los negocios. En otras palabras, se pretenderá industrializar la inteligencia artificial para saber de antemano cuándo un aparato necesita mantenimiento y concebir más códigos de seguridad (por ejemplo, automatizar y agilizar las operaciones internas de un software). Para ello, será clave que los trabajadores de los sectores informáticos sigan instruyéndose. Y esto último lleva a otra prioridad: retener el talento humano mediante la diversificación de la fuerza laboral tecnológica (como en el aspecto de la multiplicidad étnica).
Además, se proyectan más ciberataques apuntados a los trabajadores híbridos (categoría aumentada en la pandemia) y más parones en la cadena de suministro de tecnología. Para un poderoso CIO del sector automotor, es prioritario revisar los riesgos en su cadena de suministro de nube digital (sobre todo en empresas que usan el servicio de nube de terceros).
Por último, se observa que a los directores de información se les asignarán más tareas hasta el punto de que se conviertan prácticamente en semidirectores ejecutivos. Esta tendencia se ve más que nada en empresas tecnológicas, donde los CIO están propulsando un fuerte cambio y convirtiéndose en grandes líderes empresariales.
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