La digitalización de los servicios financieros y la Banca en general llevó a que la industria pusiera el ojo en la seguridad de sus usuarios. Durante la pandemia, donde muchos trámites y acciones de la vida cotidiana se volcaron a la virtualidad, crecieron exponencialmente en la región los casos de robo de identidad, phishing o vishing, entre otras acciones vinculadas al fraude financiero.
Por eso, con el objetivo de detectar con mayor rapidez y eficiencia las operaciones sospechosas, y congelar los fondos de posibles fraudes, bancos, comercios y fintechs han establecido unos primeros acuerdos de cooperación de intercambio de información en algunos países de la región.
Innovación colombiana
También, en este contexto, hubo emprendedores que detectaron la necesidad de fortalecer la seguridad financiera de la industria y pusieron manos a la obra. Por ejemplo, una startup colombiana desarrolló una API de prevención de fraude que puede ser utilizada por cualquier comercio, banco u otra fintech. La innovadora solución- según describen medios locales- les permite a estos consultar y compartir gratis el historial crediticio de las personas.
Según dijeron sus fundadores, dependiendo el nivel de riesgo identificado, esta herramienta puede generar alertas. Esto es posible gracias a la creación de un algoritmo propio que combina diferentes fuentes de información.
A su vez, describen que hay varias “situaciones” que pueden generar alertas sobre posibles intentos de fraude. En el caso de este desarrollo colombiano en particular- según profundiza La FM-, la información básica entregada por la persona que se está registrando se analiza, se contrasta consultando con fuentes externas, y luego se personaliza el proceso de registro. En caso de detectarse varias inconsistencias en la información, puede llegarse a bloquear la cuenta de la persona.
