En un contexto generalizado donde las empresas se están viendo obligadas a responder dinámicamente, la demanda de aplicaciones (apps) ágiles, resolutivas y veloces cada vez se hace más notoria. Por eso, en el último tiempo ganaron terreno las plataformas low code, que permiten a las organizaciones, aún con equipos de trabajo pequeños y sin tanto presupuesto, desarrollar aplicaciones, sitios web o productos SaaS, además de hacer integraciones funcionales en menor tiempo.
Miren si tendrán relevancia estas plataformas que se estima -de acuerdo a un estudio de la consultora Gartner– que para 2025 el 70% de las nuevas aplicaciones desarrolladas por las organizaciones utilizará tecnologías de código bajo o sin código. Actualmente, ese porcentaje se encuentra apenas por encima del 25%.
Según el informe de esta consultora internacional, con la aparición de estas plataformas de código bajo “se está impulsando el aumento del desarrollo ciudadano, y, en particular, la función de los tecnólogos comerciales que informan fuera de los departamentos de TI y crean capacidades tecnológicas o analíticas para uso comercial interno o externo”.
A su vez, especialistas del sector explican que, a partir de estas plataformas, que utilizan interfaces gráficas de usuario de ‘arrastrar y soltar’, “los programadores ciudadanos pueden colaborar o aportar en la creación de herramientas para las compañías en las que se desempeñan”.
Potencial enorme
Se calcula que para 2027 el mercado global de plataformas de desarrollo de código bajo superará los US$ 36 mil millones. En 2021, según marcan los registros, se valoró en US$ 7.610 millones.
Está claro que, aunque estas plataformas necesiten de cierto conocimiento sobre cómo codificar, el tiempo y esfuerzo necesario para crear nuevas aplicaciones se reducen exponencialmente con el low code.
Ventajas competitivas
El Low Code favorece a la transformación digital, facilitando los tiempos de comercialización de una app, mejorando las experiencias de los usuarios, automatizando procesos y actualizando sistemas clave.
Las empresas que se vuelcan a estas, aseguran los especialistas, tienen más capacidades de innovar y pueden responder velozmente a los cambiantes condiciones del mercado. En el último tiempo, el low code ganó mucho terreno dentro de la industria del software.