Los Tokens No Fungibles (popularmente conocidos como NFT) están pisando cada vez más fuerte, generando grandes comunidades que brindan a quienes la integran estatus, beneficios y exclusividad. En el último tiempo se transformaron en una interesante opción de inversión digital. A continuación, veremos por qué.
Iñaki Apezteguia, docente y comunicador cripto, explica que los activos no fungibles son únicos y no divisibles. Dice que deben considerarse como un tipo de escritura o título de propiedad de un artículo único y no replicable. “Representan un elemento único e indivisible, físico o intangible, como una imagen o propiedad intelectual”.
En esa misma línea, señala que el Blockchain es la tecnología subyacente que puede demostrar fácilmente la propiedad de un elemento digital intangible y protegerla de la falsificación.
El lugar de los NFT en los jóvenes
Apezteguía asegura que los NFT, por su contexto y características, se están ganando el “cariño” de los más jóvenes, que pueden participar en las experiencias de creación, uso y comercialización de estos activos en forma más intuitiva y accediendo a generar sus primeros ingresos.
“Para operar en forma segura con estos criptoactivos, es importante acudir a marketplaces que tengan volumen de transacciones, oferta amplia de activos, creadores (artistas) validados y buena performance en soporte. Es saludable también operar tanto en marketplaces centralizados como descentralizados, para poder tener opción a ser uno su propio custodio de NFT y no delegar en terceros”, profundiza el experto argentino.
Por otro lado, enfatiza lo importante que es, antes de llegar a invertir en un NFT, reparar en cuáles son las características de ese Token No Fungible. En ese sentido, señala la escasez (que exista una cantidad limitada), la originalidad (que sea único e irrepetible), la seriedad del equipo que se encuentra detrás y la propuesta de valor como cuestiones a considerar.
“Para el tenedor de un NFT, representa mucho más que una imagen, es un certificado de titularidad digital de un activo que no se puede falsificar, que puede ser comercializado en un marketplace global sin restricciones, y su valor estará asociado a sus características. Si asociamos estas fortalezas de los NFT a otros aspectos de la vida, podemos pensar a futuro en NFT de nuestra identidad, de títulos de autos o casas, votos, entradas a conciertos, entre muchas otras aplicaciones”, cierra.
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