Los bancos pueden hallar en la inteligencia artificial a un aliado clave en aspectos como la atención al cliente y la rentabilidad, donde pueden encontrar más y mejor resolución de problemas. Por ejemplo, los usuarios pueden interactuar con el banco todos los días a cualquier hora (como en el habla virtual); y a su vez, este puede detectar fraude y gestionar riesgos de una forma más eficaz. Según muestran estudios recientes, no caben dudas de que el futuro de la banca pasará por la inteligencia artificial.
Corriendo de atrás
Las fintechs (tecnologías financieras), que brindan servicios análogos a los de los bancos, ya han implementado estas innovaciones, lo cual es otro motivo para que los bancos se apresuren en imitarlas. Yendo al caso, se vaticina que en 2024 la inteligencia artificial y los procesos automatizados hayan suplido a un 25% de las aplicaciones actuales. Y para 2025, se espera que el valor de la inteligencia artificial en las tecnologías financieras llegue a más de US$22.000 millones.
Los aportes de la inteligencia artificial a los bancos
Mejorar la experiencia
Ante el reclamo de usuarios que no hallan la opción que quieren dentro de las que ofrece la respuesta de voz interactiva, hay un asistente virtual que procesa el lenguaje natural de las personas y su contexto. Se trata de un robot entrenado para resolver en seguida el inconveniente, o bien derivarlo a un agente especializado. Esto reduce 24% los errores en las transferencias al atender una consulta.
Mayores ingresos
Gracias también al análisis predictivo, el robot ofrece lo que el cliente necesita en determinado momento (lo que aumenta las chances de concretar una venta de seguros, créditos, tarjetas y demás productos y servicios dadas las características personalizadas del proceso -aunque también se puede trabajar en conjunto con personas-).
Aumenta la capacidad de atención
En gran parte por culpa de la pandemia de covid, el número de consultas virtuales se dispararon. Esto provoca saturaciones en los sistemas y disconformidad de los clientes producto de volúmenes excesivos que no pueden ser manejados adecuadamente. Para ello, pueden usarse robots que charlen con los usuarios por cualquier medio (escrito u oral) y hagan subir el nivel del servicio a su plenitud (independientemente del tráfico existente).
Reduce costos operativos
Se pueden economizar hasta 70% de gastos gracias a la precisión de la inteligencia artificial en tareas aún hechas por humanos, ya que se procesan grandes volúmenes de información con algoritmos automatizados.
– Compliance regulatory: Los bancos deben acatar todas las normas del sistema bajo pena de multas si no cumplen con ellas, y los asistentes virtuales son una excelente herramienta para ello porque solo proceden si completan los pasos requeridos. Es decir, no se saltan ningún campo, no falsean respuestas, dejan marca de todo lo que hacen y dicen, y su accionar puede revisarse en tiempo real.