Fue a raíz del concepto de Industria 4.0 que comenzó a hablarse del Smart Manufacturing, incluyendo aquí tecnologías como el Internet de las Cosas, el Cloud Computing, Análisis de Datos, Machine Learning e Inteligencia Artificial. Cada vez observamos en el mundo más y más fábricas adoptar tecnologías para optimizar y automatizar sus procesos operativos y estratégicos.
A pesar de lo importante que es la Industria 4.0 (conocida como la cuarta revolución industrial) para que las empresas continúen siendo competitivas y crezcan a la par de las exigencias del mercado, la realidad es que en la Argentina aún existen limitaciones que impiden que el país se encamine en esa dirección.
Sin embargo, lo positivo es que detrás de todas esas barreras, expertos y analistas locales del sector aseguran que hay un sinfín de oportunidades y que solo es cuestión de saber cómo afrontar los desafíos que se presentan.
En esa misma línea, señalan que si bien son muchas las organizaciones que se animan a dar el salto hacia la transformación, el porcentaje de aquellas que lo logran hacer con éxito no es tan elevado. Y unas de las razones tienen que ver con el desconocimiento y la subestimación de ese cambio.
Según estos profesionales, hay cuatro retos que la Argentina debe superar para aprovechar realmente la transformación digital.
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Déficit de mano de obra especializada
Dicen que hay que promover la formación en informática y en carreras STEM, ya que falta talento capacitado para cubrir toda la demanda que hay en el mercado. Esto es algo que preocupa al Ministerio de Desarrollo Productivo de Argentina. Por otro lado, señalan que “la falta de oferta local de empresas que presten servicios especializados en el mantenimiento del paquete tecnológico 4.0 puede convertirse en una limitante para su implementación. Pero al mismo tiempo, las empresas pueden encontrar un nicho de mercado en esta área para progresar”.
Conectividad
Como segundo punto, estos expertos mencionan un estudio de la Universidad de San Martín (UNSAM), que revela que las industrias que desarrollan procesos de automatización e incorporan máquinas robóticas mantienen una conexión integral durante todo el proceso de producción. “Es por eso que tendrán un gran desafío en la protección de los ataques a esta conectividad”, dicen.
Costo de innovación
Innovar es caro. Y la Argentina no está para “tirar manteca al techo”. Sin embargo, lo positivo que marcan estos especialistas es que la fuerza principal está en el capital humano.
Especialmente en lo que respecta a nivel educativo, la calidad de la formación profesional y las competencias digitales.
Brecha productiva
Para cerrar, mencionan una encuesta de CIPPEC, que describe que cerca de la mitad de las 307 empresas argentinas entrevistadas utilizan tecnologías de primera y segunda generación, y parecen inactivas ante el cambio tecnológico. “Solo el 6% está cerca del pico tecnológico, aunque no son del todo 4.0. Una brecha importante, y quien se diferencia en el mercado es quién aprovecha esta oportunidad”, exponen.
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