La nube híbrida sigue ganando adeptos. De acuerdo a un estudio, esta opción que combina servicios de nube pública y de nube privada local ya fue adoptada por el 80% de las compañías a nivel global. Además, se espera que la tasa de crecimiento anual de dicho mercado se expanda a 21% entre 2021 y 2026.
Esto se da en un contexto donde la pandemia obligó a las empresas a modificar su forma de trabajar. Muchas organizaciones debieron tomar medidas de 180 grados para mantener la comodidad de sus trabajadores, la seguridad de la compañía y no reducir su productividad.
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La voz de los expertos
Según Cristian Rojas, Chief Technoly Officer, dice una de las grandes virtudes de la nube híbrida es que habilita a personalizar fácilmente la ubicación de los recursos en función de las cargas de trabajo y las aplicaciones. Señala que brinda “agilidad al permitir que las cargas de trabajo y los datos se muevan entre nubes privadas y públicas de manera flexible”.
También, de acuerdo a las necesidades o pautas establecidas por las empresas, este tipo de nubes (las híbridas) habilitan el uso dinámico de los recursos públicos o privados disponibles para una organización.
Configuraciones personalizadas
Una determinada aplicación, por ejemplo, se podría configurar de manera tal que hasta que se cumplan ciertos parámetros se ejecute principalmente en servidores privados. “En ese momento, podría cambiar para acceder a los recursos de la organización desde el sistema de nube pública”, indica Rojas.
En esa misma línea, desliza que, por el hecho de que minimice los problemas de privacidad y control, la configuración previamente mencionada puede ser muy útil para aquellas compañías que tienen operaciones que necesitan diferentes niveles de seguridad. Los sistemas o datos que requieran mayor nivel de seguridad, o aquellos que la organización desee mantener internamente, puede contenerse en la nube privada; mientras que los datos que necesiten de altos niveles de seguridad, se pueden alojar en un entorno de nube pública.
A la hora de decidir la combinación correcta de nube pública y privada, las necesidades de seguridad, la madurez del negocio y las demandas informáticas juegan un papel fundamental.
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