La computación en la nube (también conocida en inglés como “cloud computing”) ya se ha afirmado como parte legítima del panorama corporativo, dado que las empresas confían dinero y formación en su desarrollo. La creciente demanda de arquitectos de nube (o arquitectos cloud) indica mayor necesidad de eficiencia y adaptación a los tiempos que corren.
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Un puesto requerido
La arquitectura de nube implica hacer funcionar bien la tecnología de nube y conformar una estructura con base en las tecnologías de la información. Para ocupar un puesto así, es necesario integrar destrezas empresariales, técnicas y humanas, además de estar al tanto de la formación técnica cambiante para su sector. Y no es en vano: un experto de esta índole es tan necesitado que puede cobrar hasta 125.000 dólares.
Funciones de un arquitecto de nube
El arquitecto de nube se encarga de dirigir y administrar la nube informática de una empresa al conjugar servidores, redes, plataformas y sistemas de almacenamiento. Además, está al frente de proyectos de migración y transformación hacia modelos basados en esta tecnología. Se trata de un experto que aconseja cómo estructurar los elementos según lo que necesite el negocio actualmente y a futuro.
A su vez, planea estrategias para lograr las metas diseñadas implementando mecanismos de nube. También diseña el cómo de las soluciones de computación en la nube, localiza potenciales errores para hallar su arreglo plausible, coordina la implementación de la arquitectura armada con los sectores de aplicaciones y administra su mantenimiento, y otorga permisos y usos.
Perfil de un arquitecto de nube
Además del obvio dominio de la tecnología informática, se necesita:
– Capacidad de planificación y liderazgo: Supervisa todo el proceso de adaptación de su organización al nuevo modelo de trabajo en nube digital.
– Capacidad de comunicación y de escuchar a su equipo: Trabaja en conjunto con los demás sectores, que se deben involucrar de lleno porque todos se verán afectados.
– Asume el “outsourcing” como herramienta: Confía ciertas funciones a otra organización, especialista en el rubro, para abaratar recursos y mejorar la calidad de la labor.
– Estudios de ingeniería informática: Posee conocimientos de hardware y software, bases de datos, arquitectura de aplicaciones, automatización, diseño y ciberseguridad.
– Dominio de plataformas: Precisa conocer aspectos técnicos específicos y tener experiencia en manejar el portafolio de soluciones en la nube de las empresas líderes del sector informático.
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