Las tecnologías emergentes están transformando rápidamente la forma en que las empresas operan y se relacionan con sus clientes. En este contexto, la IA Generativa es la nueva protagonista de las agendas estratégicas en el corto plazo. No solo está redefiniendo la manera en que las empresas abordan la creatividad, la automatización y la interacción con los consumidores, sino que además abre nuevas oportunidades y desafíos en el panorama empresarial actual.
En el próximo año y medio, el 59% de los ejecutivos declara que sus empresas invertirán en nuevas tecnologías, y el 46% planifica que las inversiones serán en IA generativa, según datos que la consultora PwC publicó en su encuesta global Tecnologías Emergentes 2023. ¿El mayor desafío para los directivos? No quedarse atrás en la carrera por adoptar innovaciones.
La confianza en IA generativa
Las futuras inversiones revelan los beneficios que esperan las empresas y las expectativas que generan las nuevas tecnologías. Pese a ciertas vulnerabilidades, los ejecutivos de negocios se muestran tranquilos en cuanto al avance: el 93% coincide en que están ayudando a generar confianza. Son más aún los que esperan que esa confianza crezca en el próximo año.
En cuanto a la IA generativa específicamente, el 37% de los encuestados ya avala su uso responsable; indicador de confianza que también presenta expectativas de crecimiento en los próximos 12 meses. Sin embargo, según el informe se están implementando pocas (o ninguna) de las medidas necesarias para garantizar la seguridad en su uso.
Al respecto, Mariana Melbardis, socia de PwC Argentina de la práctica de Digital Advisory, afirmó: “Para ganar confiabilidad, muchas empresas necesitarán más acciones. Por ejemplo, la gobernabilidad de datos actual podría no ser capaz de estar a la par de los dispositivos con IoT integrada en toda la extensión de las operaciones. A su vez, la IA generativa se presenta como fácil de usar, en especial cuando tiene una interfaz basada en un chat, pero es fundamental contar con adecuadas herramientas de control, políticas de uso, supervisión y capacitación para confiar en los resultados que entrega”.
Actualmente, menos de la mitad de las empresas aplican medidas para generar confianza en las tecnologías emergentes. En ese sentido, el estudio propone 5 ideas, con un enfoque tecnológico de liderazgo humano:
1- Convocar talento: formar equipos con las personas apropiadas, identificando las habilidades y fortalezas para que se trabaje en pos de objetivos comunes, con roles y responsabilidades claras, lo que brinda seguridad.
2- Adaptar la IA a la empresa, no que la empresa se adapte a la IA: hacer que las tecnologías emergentes se integren con la estrategia y valores de la compañía.
3- Concentrarse en los resultados: los datos cuantitativos y mediciones cualitativas pueden ayudar a monitorear los avances en la generación de confianza.
4- Estar preparados para imprevistos: generar concientización y prevención es fundamental para la seguridad de los datos.
5- Implementar IA responsable: se trata de un conjunto de herramientas diseñadas para asistir en el uso efectivo y ético de IA, capacitando a las personas que integran la organización.
De este modo, anticipándose a las tendencias, las empresas pueden aplicar medidas generalizadas para fomentar la confianza en las tecnologías emergentes, que pueden contribuir a abordar problemas en áreas tan diversas como gestión de riesgos, cumplimiento, desempeño, impacto en el personal y retorno sobre la inversión, entre otras; integrándose a la revolución de la inteligencia artificial.
