Está en casi todos los celulares. Nombre original: Near Field Communication. Abreviatura: NFC. Su traducción: comunicación de campo cercano. Su fin: enviar información entre dos equipos portátiles cercanos de una forma mejor y más segura que el bluetooth o el wifi tradicional.
Se trata de una continuación de la tecnología de identificación de radiofrecuencia para abrir puertas de edificios, y se puede aplicar mediante un protocolo activo (donde ambos artefactos pueden enviarse información) o pasivo (donde uno de los dos necesita de la energía del otro para transferir datos).
¿Qué es NFC?
Las siglas NFC son las iniciales en inglés del término “comunicación de campo cercano” (near-field communication). Se trata de un tipo de tecnología que sirve para el intercambio de datos en alta frecuencia (13,56 MHz) entre dos dispositivos con conexiones inalámbricas y colocados a muy corta distancia entre ellos (no más de 15 centímetros). Esto puede darse por ejemplo entre dos teléfonos móviles o dos tabletas, o entre un teléfono móvil y una terminal de pago o un parlante.
¿Qué tecnología utiliza?
La NFC tiene su prototipo en el bluetooth, que lógicamente resulta muy similar. Ambas técnicas posibilitan la comunicación inalámbrica; aunque no con internet, sino a través de ondas de radio. La tecnología NFC genera el campo electromagnético mediante inducción, lo que dentro de aquel permite vincular al objeto transmisor con el receptor de la información.
A su vez, tiene dos modos de funcionamiento: activo (ambos dispositivos generan su propio campo electromagnético al tener fuente de energía equipadas, y así pasarse contenido mutuamente) y pasivo (uno de los dos aparatos no tiene fuente propia de energía y por ende depende de que el otro cree el campo de inducción).
Esto significa que en el modo activo hay un flujo bidireccional de datos (útil para autenticar identidades o verificar pagos), mientras que en el modo pasivo el dispositivo con fuente de energía propia obra de lector de la información que contiene el dispositivo sin su respectiva fuente.
¿Cómo y por qué nació?
Su raíz más primigenia se remonta a las etiquetas RFID (identificación de radiofrecuencia), que se usan en las puertas de los supermercados para identificar a los productos que no hayan sido pasados por el escáner de la caja. Dichas etiquetas funcionan como un modo pasivo de NFC, donde el lector de seguridad es el artefacto activo, y la etiqueta del producto, el pasivo que es leído. A su vez, también se utilizan hace mucho para acceder a edificios o habitaciones de hotel.
El NFC propiamente dicho surgió hacia 2010-2011 de la mano de empresas de tecnología y comunicación como la finlandesa Nokia, que (junto a otras corporaciones y proyectos) pretendía instaurar un método de pago más seguro que los ya existentes hasta ese momento.
¿Qué es NFC en el móvil y para qué sirve?
Los dispositivos móviles (particularmente, los celulares inteligentes -tan comunes desde hace unos años-) tienen esta tecnología incorporada desde inicios de la década de 2010. Esto está motorizado fundamentalmente por el interés de las compañías en facilitar los pagos móviles desde cualquier teléfono celular, lo que permite a su vez la digitalización de cualquier tarjeta de crédito tradicional. Dicha forma de abono “carente de contacto” consiste en acercar un celular que contenga la tecnología NFC al lector activo del comercio (punto de venta) para intercambiar la información transaccional. Las aplicaciones más populares para esto son Google Pay, Samsung Pay y Apple Pay (claramente derivadas de empresas tecnológicas del mismo nombre).
¿Qué acciones se pueden hacer con NFC en el móvil?
Pagos móviles
Se pueden tener varias tarjetas guardadas a la vez en el mismo celular porque aquellas se pueden sincronizar al móvil mediante los chips NFC que tienen instalados. Como se mencionó antes, se puede usar el lector del teléfono para abonar algo, acercándolo a la terminal de pago inalámbrica y sin necesidad de contacto (método que se popularizó con la pandemia de covid-19).
Sincronización de dispositivos inalámbricos
Se pueden acoplar otros artefactos al celular, tales como auriculares o parlantes sin cables, sin necesidad de emparejamientos previos por bluetooth. A su vez, también existen las etiquetas NFC, que se valen del modo pasivo para funcionar como etiqueta RFID y así poder configurar un artefacto con solo acercar el teléfono. Asimismo, un sistema que combina la NFC con un código QR habilita al usuario a compartir una clave de wifi o acceder a contenidos como guías turísticas encriptadas como dicho código en algún monumento o sitio de interés. Además, algunas marcas de autos de alta gama la han incorporado a sus coches para que puedan abrirse con el lector del teléfono, como si este fuese una llave.
Transmisión instantánea de archivos
Da un intercambio de datos muy rápido entre el emisor y el receptor. Si ambos dispositivos tienen NFC acoplado a su sistema operativo, pueden compartir información con solo acercarlos mutuamente (lo que es más cómodo e intuitivo que el wifi o el bluetooth).
Automatizar procesos
Una etiqueta NFC (que contiene un chip NFC sin alimentación, y se puede colocar en varios lados -como un adhesivo-) arrutina acciones cuando el celular la detecta (como conectarse al wifi al ingresar al hogar, activar la reproducción de música, prender la computadora a distancia, o configurar alertas o recordatorios), dado que toma una pequeña porción de energía del teléfono y envía la información almacenada en él. Estas etiquetas se adquieren vacías, sin información, para luego ingresarles los datos deseados.
Identificación en el cajero
Hace prescindible el uso de tarjetas para identificarse en el cajero automático a la hora de extraer o ingresar dinero en efectivo. Solamente hay que tener el teléfono desbloqueado para que el cajero lea el chip NFC incorporado y así reconozca al usuario.
Leer un DNI electrónico
En 2015, surgieron los DNI electrónicos con un chip dotado de una interfaz NFC que posibilita la lectura del documento de identidad sin tener que tocarlo. Cabe destacar que, al tratarse de datos personales sensibles, estos no se exhiben automáticamente al acercar el celular al DNI. El proceso es algo más complicado, justamente para que la información no pueda ser manipulada por un tercero a quien no le pertenezca el carnet.
Ingresos automáticos
La NFC puede significar el inicio de una nueva manera de identificación personal, ya que algunos eventos multitudinarios (como partidos de fútbol) ya ofrecen la chance de asistir con solo acercar el celular a la terminal, en reemplazo de las entradas clásicas de cartón o plástico. De modo análogo, algunas ciudades como Londres o Singapur ya han adoptado esta tecnología para viajar en transporte público.
¿Cómo saber si un móvil tiene NFC?
Hoy en día, está incluida incluso en celulares de baja gama. Si se tiene uno con sistema operativo Android, basta con solamente expandir el panel de accesos directos (o ajustes rápidos) desde la parte superior y comprobar allí si aparece una mención a “NFC” con el botón para activarla y desactivarla. También se puede ir a los Ajustes de Android y acceder al apartado llamado Conexiones: generalmente, allí se muestran las opciones para NFC. Sin embargo, puede resultar necesario utilizar el buscador en la parte superior para hallar el término “NFC”.
En cambio, si se trata de un IPhone, todos a partir del iPhone 6 tienen NFC (y sin necesidad de activarlo, porque es algo automatizado). Pero hay que recalcar que su uso es más restringido que en Android, ya que por años se utilizó únicamente para hacer transacciones exclusivamente con Apple Pay. Afortunadamente para los usuarios, desde iOS 11 Apple expandió algo su uso, y habilita a las aplicaciones desarrolladas por terceros a decodificar chips NFC.
¿Qué teléfonos tienen NFC y cuáles no?
Está presente en varios productos de Android y Apple. Concretamente, su uso se expande a los celulares de compañías como Acer, Alcatel, Asus, Fujitsu, Honor, HTC, Huawei, Lenovo, LG, Motorola, Nokia, OnePlus, Oppo, Realme, Samsung, Sony, Xiaomi y ZTE, entre otras de menor renombre, además de los iPhone (exclusivos de la ya mencionada Apple). Puntualmente, si se habla de Android, la NFC se halla presente en la versión 2.3.3 y sus posteriores (con excepción del sistema operativo Android 3.x).
¿Cómo se puede aprovechar NFC para realizar pagos?
Resulta ser un sistema más seguro, ya que es frecuentemente combinado con sistemas de verificación biométrica (tanto de la huella dactilar como de reconocimiento de cara del usuario). A su vez, se impide que un tercero (por lo general, un ciberdelincuente) interfiera en la transacción y/o robe los datos de la tarjeta, ya que se requiere un uso transparente donde es necesario que se aparejen ambos dispositivos de forma deliberada (y a una distancia sumamente reducida). Por ende, resulta más improbable que un intruso esté lo suficientemente cerca como para obtener la cantidad necesaria de señal.
¿Qué son las tarjetas SIM con NFC?
Existen tarjetas SIM con tecnología NFC donde no es necesario cambiar de celular para usar la NFC, denominadas “Tag”. Las tarjetas SIM NFC se pueden adquirir en tanto en tamaño estándar como en tamaño micro, y permiten el uso de servicios de pago mediante el teléfono móvil, además de tener los servicios que ya proporcionaba con anterioridad la tarjeta SIM común. Se puede tener acceso a las ventajas de la NFC incluso con el celular apagado (si acaso se tiene la aplicación habilitada).
Menos riesgos
El NFC móvil es más seguro que las redes inalámbricas tradicionales porque tiene un alcance de solamente diez centímetros, lo que imposibilita tener señal para robar información o pagar algo a nombre de otra persona si no se está bien cerca del puerto. A su vez, el celular pide realizar un procedimiento físico antes de conectarse al NFC, como escribir una clave o identificar la cara o la huella dactilar del usuario.
Asimismo, la información sensible almacenada en estas redes también está protegida por leyes, y también por fundas inhibidoras (que protegen el chip de ser leídos por terceros) o la propia desactivación de la tecnología en sí.
Pagar con NFC es más ágil (se realiza al instante), ecológico (no usa papeles ni plásticos), cómodo (se pueden administrar diferentes cuentas y tarjetas desde un solo equipo móvil) y sencillo (no hay que gestionar datos manualmente).